La semana pasada los arqueólogos encontraron un barco procedente de un naufragio del siglo XIX en el Seaport District de Boston, donde se encontraban excavando para construir un edificio.
Se ha comprobado que el buque de 50 pies encontrado en Boston, aún mantenía barriles llenos de cal y probablemente naufragó en el puerto, ya que anteriormente esa zona de la ciudad de Boston se encontraba bajo el mar el siglo pasado.
Los trabajadores en una obra de construcción, en cuanto descubrieron el barco del siglo XIX, llamaron a los arqueólogos para investigar cómo el barco terminó en este lugar por debajo del Seaport District de la ciudad.
El barco se encontraba a cerca de un cuarto de milla de las aguas del puerto de Boston. La compañía contactó con una firma de la arqueología local que comenzó a investigar el hallazgo. Los trabajos se han detenido por un tiempo mientras se acaban de realizar investigaciones sobre la embarcación, antes de comenzar de nuevo la construcción del centro comercial.
El barco “parece una corbeta de mediados del siglo XIX”, dijo el arqueólogo Joe Bagley a The Guardian. “Se han encontrado lo que parece ser un montón de barriles llenos de cal todavía intactas.” “El barco también parecía haber sufrido daños por incendio”, dijo.
“Parece que está todo quemado”, dijo Bagley, “eso suele pasar a barcos que transportan cal porque la cal puede conseguir reacciones exotérmicas en contacto con el agua, irónicamente.”
A pesar de las propiedades explosivas de la cal, los seres humanos la han utilizado en la construcción desde la época de la antigua Roma. En el siglo 19 también se utilizaba para la agricultura y la fabricación de papel.
La corbeta Boston fue probablemente un buque de carga, dijo Bagley, y puede haber viajado desde Maine, Nueva Inglaterra, donde habían canteras de cal, y fue enviado a los puertos a lo largo de la costa este.
El buque pudo simplemente haber encallado. En el siglo XIX, lo que ahora es un centro financiero de Boston, fue una marisma vinculada al puerto. Con la marea alta, la zona estaba bajo el agua, pero con la marea baja, un barco podía ser vulnerable quedar encallado.
Los arqueólogos están trabajando en una sección transversal de la nave, lo que les dará un plan de facto y para ayudarles a rastrear qué fue de él.
Los Dorchester Flats, como los llaman allí, se rellenaron durante la década de 1880. En las dos últimas décadas, las construcciones han llenado el borde del puerto con los rascacielos.
Este no es el primer naufragio que se encuentra bajo tierra seca de Boston: en la ciudad se encontró una ruina más pequeña mientras se trabaja en su enorme túnel de carretera “Big Dig”. Pero el nuevo barco es más grande, y esperan que se conserven piezas que den luz sobre la historia del puerto, como artefactos de la trata de exclavos, envíos de vino, comercio con Europa…