Pese a las dificultades impuestas por la pandemia a la movilidad y a la relación social, el jurado del EYOTY discutió la conveniencia de anularlo, como no podía ser de otro modo, pero la decisión fue unánime: mientras las regulaciones sanitarias lo permitiesen, había que seguir adelante.

Y así se hizo, tras consultar la disponibilidad de los astilleros para desplazar los barcos nominados a los campos de pruebas. De hecho, el EYOTY es el único galardón náutico que exige que todos los barcos sean navegados por la totalidad del jurado y que requiere por tanto la presencia del personal del astillero, los técnicos y en muchos casos los propios arquitectos y diseñadores durante las pruebas de mar.

De aquí las dificultades que había que superar, tanto para llegar al lugar de las pruebas como a la hora de reunirse para tomar decisiones. Las pruebas se realizaron finalmente en tres ubicaciones: Kiel en agosto y Cannes y La Rochelle en septiembre y octubre, pese a la cancelación de los respectivos salones.

Los ganadores

1. Crucero familiar

A esta categoría, una de las más disputadas en cada edición, se han incorporado este año también los catamaranes, una tipología en la que cada año se producen más novedades. La razón es que, monocasco o multicasco, lo que se premia es el diseño y la construcción, la relación calidad-precio y la capacidad de cada nominado para cumplir con un programa de vacaciones o crucero de media altura, con seguridad y el suficiente confort para una familia o un grupo de amigos, y en el que la velocidad será un plus, pero no el criterio que más pese.

BAVARIA C42

European Yacht of the Year 2021

© A.Lindlahr/EYOTY

2. Crucero de altas prestaciones

El único candidato que el jurado ha podido valorar en esta categoría no ha ganado por eso, sino por méritos propios. Ser el único no le resta nada a la gloria, ya que combinar las elevadas prestaciones en velocidad de un trimarán con un interior de crucero confortable no es una tarea fácil, especialmente en el casco central que, aun siendo un poco justo como crucero, es bonito y lo suficientemente espacioso para acoger a una familia durante un fin de semana o unas vacaciones con la mirada puesta en el disfrute de las sensaciones puras a vela.

DRAGONFLY 40

European Yacht of the Year 2021

© Nils Günter/EYOTY

3. Barcos especiales

Solo dos contendientes, dada la ausencia del Mojito 650 en las pruebas de mar, pero muy igualados.

Ambos cruceros de día, cabinados, con prácticamente la misma eslora, calidad constructiva, facilidad de maniobra y potencial de velocidad y capacidad para pasar una noche de fin de semana y cruceros cortos y motorizados eléctricamente. Finalmente se impuso el Saffier frente a un Tofinou de estética realmente inigualable.

SAFFIER SE 27 LEISURE

European Yacht of the Year 2021

© A.Lindlahr/EYOTY

 4. Crucero de lujo

El grupo de los cruceros de lujo ha reunido este año tres modelos, dos de ellos en el rango de los 40 pies y el tercero, el ganador, que ya se

aproxima al segmento de los 60 pies. Pero en esta competida categoría el ganador no solo debe destacar por tamaño, sino porque al subirse a bordo uno no pueda más que exclamarse: por la estética, unos elevados estándares de construcción, la elegancia del diseño, el equipamiento, la artesanía en los acabados y la excelencia en los materiales de los interiores. Pero, sobre todo, por su capacidad para ofrecer un absoluto confort en cualquier singladura. No se premia la radicalidad sino la coherencia del conjunto y el equilibrio entre calidad, confort y prestaciones.

CONTEST 55 CS

European Yacht of the Year 2021

© Nils Günter/EYOTY

 5. Crucero de altura

Siguiendo la tendencia en un mercado que se está inclinando hacia los barcos multipropósito o todoterreno capaces de enfrentarse a todo y llegar tan lejos como su propietario decida, esta categoría ha sido en esta edición muy prolífica, con cinco veleros en liza, cuatro de ellos construidos en aluminio.

El ganador debe ser un barco que incorpore soluciones probadas en todos los aspectos, desde la maniobra de velas a la calefacción, pasando por la protección en cubierta en las condiciones más duras de los océanos australes, la autonomía, la estabilidad o la seguridad frente a colisiones. Construir un barco de recreo de este tipo no es ni fácil ni barato, pero al adquirirlo su propietario puede tener la certeza de que es un valor seguro.

BOREAL 47.2

European Yacht of the Year 2021

© A.Lindlahr/EYOTY

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