Cuando uno piensa en lo que conlleva que un equipo olímpico acuda a los Juegos Olímpicos que se celebrarán este verano en Japón no suele caer en la “trastienda” que funciona a contra reloj, y los containers con todo el material que necesitan los deportistas es esta semana un sprint.

El CEAR Príncipe Felipe de Santander amanece en plena ebullición el 24 de febrero. La primera carga rumbo a la villa olímpica está lista y es el “container-taller”, reconvertido para trabajar en él. Está lleno de herramientas, fibras, material de reparación, etc, y se ha personalizado según las necesidades de los miembros del equipo olímpico. Para aprovechar la carga en él también se cargarán varias de las neumáticas de los entrenadores.

A continuación, ha sido el turno de otros tres contenedores más, donde cada equipo ha ido cargando cuidadosamente sus embarcaciones –dos por clase-, mástiles, velas y otros materiales. Los mismos deportistas, técnicos y personal del CEAR son los encargados de encajar un puzzle donde no puede faltar ni sobrar un metro cuadrado.

Serán más de dos meses de viaje en mercante, desde Bilbao –puerto de salida- hasta Japón, donde se espera que el próximo 1 de mayo llegue a la localidad de Yokohama.

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